IGLESIA DE SANTA BIBIANA.
Fotos personales tomadas el 6 de noviembre de 2019.
La ciudad de Roma siempre tiene una gran reserva de sorpresas y en las más humildes iglesias uno puede descubrir joyas de la arquitectura, de la escultura y del arte en general. Es lo que me ocurrió al entrar por mera curiosidad y sin tener mayor información a esta obra de arte constreñida por las vías del ferrocarril y una avenida.
RECURSO.
Santa Bibiana es una pequeña iglesita en la Via Giovanni Giolitti, 154, que ha permanecido en pie en medio de las vías del ferrocarril, quizás por ser su fachada la ópera prima de Bernini en arquitectura en Roma, encargo del Papa Urbano VIII Barberini, y la imagen marmórea de la capilla mayor su primera santa de altar, realizada entre 1624 y 1626. Quien iba a decir que de este modesto encargo iban a surgir tan grandes obras para el papado del singular artista.
Pese a estar a escasos metros de la entrada lateral izquierda de la Estación de Termini, pocos son los visitantes de la ciudad que llegan hasta ella, algunos casi de casualidad; les informo que merece totalmente la visita.
Es de planta basilical, de tres naves, separadas por bellas columnas de acarreo, levantada sobre la casa de Santa Bibiana, mártir de la época de Juliano el Apóstata, que fue flagelada en una columna que se conserva a la entrada de la iglesita.
En los muros laterales de la nave mayor está pintada al fresco la historia de la santa por los famosos artistas barrocos Agostino Ciampelli (derecha) y Pietro da Cortona (izquierda).
En una urna bajo el altar mayor se conservan las reliquias de Santa Bibiana, de su hermana Santa Demetria y de la madre de ambas Santa Dafrosa.
Pese a estar a escasos metros de la entrada lateral izquierda de la Estación de Termini, pocos son los visitantes de la ciudad que llegan hasta ella, algunos casi de casualidad; les informo que merece totalmente la visita.
Es de planta basilical, de tres naves, separadas por bellas columnas de acarreo, levantada sobre la casa de Santa Bibiana, mártir de la época de Juliano el Apóstata, que fue flagelada en una columna que se conserva a la entrada de la iglesita.
En los muros laterales de la nave mayor está pintada al fresco la historia de la santa por los famosos artistas barrocos Agostino Ciampelli (derecha) y Pietro da Cortona (izquierda).
En una urna bajo el altar mayor se conservan las reliquias de Santa Bibiana, de su hermana Santa Demetria y de la madre de ambas Santa Dafrosa.
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