ESQUELETO. ICONOGRAFÍA CRISTIANA.

VIVENS MORÍ VIDA [MUERE LA MEMORIA VIVA]

IGLESIA SANTA MARÍA DELL'ANIMA. Fotos personales tomadas el 11 de noviembre de 2019.

Al contemplar estas obras de arte del barroco y de la iconografía cristiana tenemos que despojarnos de los sentimientos contemporáneo que su contemplación nos puede evocar y evitar caer en una interpretación anacrónica. Para la espiritualidad cristiana tanto cráneos, tibias cruzadas o esqueletos tienen el objetivo de recordarnos que la muerte nos hace democráticamente iguales y es el fin de todas las vanidades y soberbias. El esqueleto alado representa la transición entre el fin de la vida y la resurrección cuando los muertos se han de levantar de sus tumbas para enfrentar con fe el Juicio Final. También el esqueleto es el símbolo del fin de la vida terrenal y el comienzo de la vida que no tiene fin. El esqueleto, despojado de todo elemento tétrico, es portador de un mensaje moralista con símbolos propios del pensamiento cristiano. Estos símbolos y acompañando el mensaje se complementa con la clepsidra alada que nos habla de aprovechar el tiempo y no perderle en las vanidades terrenales.